Feria Medieval

Después del duro trabajo en los talleres de los
artesanos, llegó el momento de la Feria. No fue una feria de 30 días pero... ¿Sabéis cuantas cosas pudimos hacer en uno?

La música dio comienzo a la feria de la Villa
de Crunia. Empezaron los juegos, los bailes de cortesanos... y después, lo más esperado: se abrieron los puestos del mercado.

Broches, pulseras del amor y la salud, búhos de
la fortuna, un mesón lleno de delicias para degustar... todo estaba en venta.

Era el momento de gastar los maravedies.